El pasado martes 26 de Marzo de 2019 tuvimos la oportunidad de disfrutar de una jornada excepcional que contó con la presencia de profesionales y responsables de equipos de ámbitos tanto del deporte como del mundo empresarial.
El objeto que nos reunía allí no era otro que encontrar respuestas en estos momentos a los diversos retos a los que las empresas se están enfrentando día a día. Comprobar que la inquietud es generalizada, es motivo de satisfacción, debido a la conciencia que existe en todos los sectores de adaptarse a un mundo que avanza a velocidad de vértigo y en continuo cambio.
Para ello, desde Entreno Luego Emprendo se pensó por una parte dotar a los asistentes de varias claves que le pudieran ayudar en el desarrollo de sus equipos, y para ello, se contó con la presencia de Bruno Moioli. Como es habitual en todas sus intervenciones, conectó con la audiencia, dejó muchos apuntes a tener en cuenta acerca de los entornos V.U.C.A. en los que estamos inmersos, y sobre todo, puso en valor la importancia de la inteligencia emocional una vez más como clave en el la optimización de los equipos de alto rendimiento. ¡¡También nos enseñó que con una manzana y un limón podemos llegar hasta la esencia de qué podemos hacer para poder crecer e innovar en nuestros equipos!!
Tras la finalización de la ponencia de Bruno Moioli, proseguimos con la dinámica World Café, liderar desde la innovación, realizada por Goyo Chanfreut. El World Café es una metodología que cuenta ya con varios años en su haber y cuyo principal propósito es llegar a ideas innovadoras conectando los conocimientos individuales de los asistentes, pudiendo llegar a un conocimiento colectivo mayor, a través de la fuerza de la conversación. La conversación es lo que nos diferencia a los Seres Humanos del resto de las especies, y es lo que ha hecho que hayamos progresado tanto en esta última era.
La dinámica consistía en dividir a los participantes en una serie de mesas, para que a partir de ese momento, contestaran a la pregunta que tenían en su poder en el centro de la misma. Conseguimos con grupos reducidos (4-5 personas) crear participación, compartir conocimiento e involucrar a todo el mundo. Exploramos de manera abierta cada uno de los temas, en lugar de una intervención para solucionar un problema, como solemos acostumbrar.
Los participantes no necesitan tener el mismo punto de vista de la situación, sino que comparten su entendimiento, y lo que es verdadero y tiene significado para el mismo.
Asignamos un tiempo para poder dar respuesta a cada reto planteado en cada mesa, y en torno a los diez minutos, comenzaron las rotaciones entre mesas, no pudiendo repetir compañeros ni pasar dos veces por la misma mesa.
El entorno de la Torre Sevilla nos acompañó magníficamente, y los asistentes iban viajando de mesa en mesa, llevando siempre consigo la esencia la última ronda en la que hubieran estado inmersos, compartiéndola así con sus nuevos compañeros.
Las preguntas a las que los participantes se enfrentaron en esta ocasión fueron:
- ¿Cómo son los equipos innovadores?
- ¿Qué características tiene un líder cuyo equipo innova?
- ¿Qué necesita un líder para que su equipo innove?
- ¿Qué necesitamos eliminar para que nuestro equipo innove?
- ¿Qué primer paso podemos dar mañana para mejorar como equipo innovador?
1. ¿Cómo son los equipos innovadores?
• Tienen Actitud y Aptitud.
• Son equipos que saben escuchar.
• Son equipos con la capacidad de adaptarse a las distintas circunstancias que se les presentan.
• Son equipos en los que todos sus integrantes aportan.
• La diversión se encuentra dentro de ellos. • La creatividad brilla y es protagonista.
• Son equipos ganadores, entendiendo la victoria como equipos que compiten y rinden en cualquier situación.
• Sus integrantes son proactivos, fruto precisamente de la capacidad de delegar que su líder muestra.
• Y son equipos dinámicos, como consecuencia de todo lo anterior.
2. ¿Qué características tiene un líder que innova?
• Tiene una visión definida, y es capaz de transmitirla y contagiar a su equipo.
• La comunicación es una habilidad fundamental en él.
• Es una persona muy creativa.
• Valiente en las decisiones y puntos de vista.
• Generoso.
• Se inspira constantemente en otras fuentes, de la misma manera que no deja de inspirar a los suyos.
• Delega en todos sus subordinados, fruto de la confianza que posee en ellos.
• Permite la libertad como uno de los rasgos fundamentales en los miembros de su equipo, lo que potencia la responsabilidad de los mismos.
• Tiene un carácter integrador de todas las personas, departamentos y puntos de vista.
3. ¿Qué necesita un líder para que su equipo innove?
• Autonomía, propia y para su equipo.
• Conocimiento, con lo que podrá manejar técnicamente bien su actividad.
• Confianza, propia, y en su equipo.
• Respeto de su superiores, y también demostrarlo en su equipo.
• Necesita hacer todo lo necesario para tener un clima de trabajo propicio y agradable para el desarrollo de la actividad.
• Ser un líder accesible, al que todos puedan llegar sin ningún tipo de dificultad.
• Deberá humanizar el equipo, poniendo siempre a las personas en el centro.
• Estar abierto a nuevas y cuantas más experiencias mejor, para poder compartir los aprendizajes.
• Integrar a las distintas partes de su equipo.
4. ¿Qué necesitamos eliminar para que nuestro equipo innove?
• Los castigos y amenazas.
• Las barreras que no nos permiten avanzar.
• Los celos internos.
• La rigidez a la que ya nos hemos acostumbrado a trabajar.
• Los prejuicios tanto internos como externos, que tenemos hacia compañeros, colaboradores, proveedores o clientes.
• La desidia que nos invade en algunos momentos, y que nos hace bajar los brazos.
• El miedo a afrontar situaciones comprometedoras.
• Los egos y las luchas de poder internas.
• Los horarios que no nos permiten conciliar y dar lo mejor de nosotros.
5. ¿Qué primer paso podríamos dar mañana para mejorar como equipo innovador?
• Comenzar por escuchar y colocar a las personas en el centro, humanizando así más nuestro equipo/empresa.
• Establecer nuestro centro de trabajo como un entorno divertido, en el que a través de la alegría podamos disfrutar de lo que hacemos.
• Que la comunicación fluya en todas las direcciones, y no en un único sentido de arriba abajo, siempre.
• Cambiar la actitud, cambiando los roles y ganando así empatía con los compañeros.
• Fijarme en qué están haciendo los otros (tal como ocurrió con el limón) para ver en qué me puedo inspirar para hacer cosas diferentes.
• Cambiar la cultura del error, premiando la iniciativa y no castigando su aparición.
• Practicar la escucha activa desde ya!
• Reforzar positivamente al compañero y prestarle ayuda cuando sea necesario.
• Establecer lluvia de ideas o prácticas similares para poder hacer las cosas de manera diferente.
De esta manera, y tras casi 40 minutos de acción, llegamos a las conclusiones finales que fueron expuestas por los anfitriones de cada mesa, en las que pudimos evidenciar los patrones que se iban repitiendo, y cómo el conocimiento iba creciendo a medida que pasaban los minutos.
Con lo recogido en el documento, así como en los ‘manteles de trabajo’ podemos ver la potencia de la actividad, y cómo nuestro punto de vista acerca de lo que creíamos era la innovación, se ha elevado de manera considerable, al dejarnos llevar y fluir en la experiencia, sin prejuicios, sin etiquetas, sin rigidez, con respeto, apertura y pasión. Tanto si eres líder de un equipo, como gestor de personas o propietario de una Pyme, aquí tienes bastante información con la que podrás reflexionar, y conocer en qué punto te encuentras, para poder crecer tanto personal como profesionalmente, y ayudar a tu equipo a que encuentre la motivación y sentido al logro de los objetivos marcados.